A todos y a todas nos gusta sentirnos bellos y deseados y es que, con el paso del tiempo, hemos derivado en una sociedad en la que gran parte de lo que podemos descubrir de nosotros mismos o, que puedan saber de nosotros, viene dado por la imagen que lucimos cada día. Por todos es sabido que una buena primera impresión ya nos hace ganar muchos enteros en todos los aspectos de nuestra vida, sin embargo, lo cierto, es que un mal día o, simplemente, no tener ganas de arreglarnos, es algo que nos pasa a todos varias veces en la vida. No obstante, dejando ese tipo de días a un lado, la realidad es que cuando queremos lucirnos, debemos de tener en cuenta una serie de factores que pueden ser determinantes a la hora de cerciorarnos de haber hecho las cosas bien o no. Para ello, en este post os queremos acercar algunos de los consejos más básicos en cuanto a peinados que podemos seguir de una forma fácil y rápida con el fin de ser siempre los más bellos y bellas del lugar.
Para los que no podemos disponer de un estilista a nuestra disposición, a continuación, os vamos a contar un secreto para lucir el mejor peinado para nosotros. Para ello, debemos tratar de descubrir cuál es nuestro tipo de cara. Si nos miramos, como es lógico, al espejo y cogemos algún objeto alargado que tengamos por casa, ya sea un lápiz o una regla, con él, podremos saber las proporciones de las distintas partes de la cara. En caso de no tener lápices o reglas, simplemente con la cinta métrica que usamos para coser, también podemos llevar esta tarea a cabo. A partir de este momento ya podemos adaptar nuestro peinado a la forma de nuestra cara, de la siguiente forma:
- Rostros ovalados. En este caso, las melenas largas o medias melenas a las que podemos añadir diferentes capas a los lados acentúan el rostro, por lo que son una buena elección para lucir. Además, tienen la particularidad de que nos estilizarán el rostro, haciendo que parezca más delgado.
- Caras alargadas. Los peinados de pelo corto con volumen son los mejores para este tipo de rostro, aunque si optamos por la media melena, esta también redondeará nuestra cara. Lo que si que debemos de evitar a toda costa son las melenas largas y lisas, ya que parecerá que tenemos la cara todavía más estirada de lo que realmente es.
- Cara redonda. Lucir una media melena que nos llegue a los hombros o llevar una melena larga, serán las mejores opciones, aunque en el segundo caso, lo mejor será llevar un peinado que pase la altura de nuestra barbilla. En estas caras los flequillos y cortes bob están prohibidos.
- Cara en forma de corazón. La media melena pegada al rostro o los peinados con una raya al medio son los más favorecedores para esta composición. Además, si optamos por ondas, haremos que nuestra barbilla parezca algo menos afilada.
- Rostros cuadrados. Los cortes capeados y desfilados harán que las líneas de nuestro rostro semejen mucho más dulces. Además, para los que tenemos frente amplia, tenemos la opción de peinarnos con flequillo.
- Rostros con forma de diamante. Para esta configuración de cara, un corte estilo garçon es la mejor opción por la que podemos optar.
Sea cual sea nuestro tipo de cara, lo mejor que podemos hacer es acudir a Avenue Hair Salon y es que ellos poseen las mejores peluquerías, con unos profesionales altamente cualificados que nos aconsejarán que es lo que mejor nos sienta y nos harán lucir divinos y divinas.
Los peinados no siempre son del gusto de todo aquel que los ve
El mundo de los peinados es mucho más complejo de lo que nos podemos imaginar ya que en la sociedad globalizada en la que nos ha tocado vivir, cualquier mínimo cambio en nuestro pelo puede no pasar desapercibido por millones de personas a través de la red, un hecho que puede llegar a generar incluso controversia y debate social, como le pasó recientemente a Kim Kardashian, quien, en los MTV Movie & TV Awards de este año 2018, lució un peinado diferente a los habituales en ella que llegó incluso a enfadar a miles de fans en todo el mundo. Sin embargo, lo cierto, es que otros miles de ellos aplaudieron su decisión de haber optado por un peinado con el que se sienta cómoda y a gusto para vivir esa gala, sin tener que importarle lo que unos u otros piensen.
