Uno de los días más felices en la vida de una persona es el día de la boda. En ese día las parejas quieren que sea un día perfecto, que los invitados se encuentren lo más confortable posible y que quede un magnífico recuerdo para toda la vida.
Como es lógico hay una serie de aspectos de la boda que no pueden controlarse ni dependen de manera directa de los novios, caso del tiempo meteorológico. Aunque uno planee la boda a principios de julio y piense que no lloverá, nunca se sabe si puede ser justo ese día que llueva, por ejemplo.
Existen otros detalles donde aquí si que tenemos mucho que decir y no se puede fallar: elegir con acierto al fotógrafo de bodas, algo importantísimo para que, en ese día, todo salga perfecto y sea capaz de reflejar la magia que tiene ese día.
Las prisas nunca son buenas consejeras y debes tener claro que elegir al fotógrafo para el final es un error. Si seleccionamos a alguien que haga el reportaje por hacerlo, seguro que vamos a tener un reportaje de bodas, frío y anodino. Esto hace que lo mejor sea el contratar a un fotógrafo de bodas profesional, que además de acudir a hacer las fotos el enlace, también se preocupe por conocer a la pareja, saber cómo os conocisteis, lo que os gusta y qué estilo es el mejor que os puede ir según vuestra imagen. Hablamos de un reportaje personalizado y hecho a medida.
Una vez que hayamos contactado con el profesional que hará las fotos, deben detallarse y conocer de forma detallada la totalidad de las posibilidades, para esto hay que tener pensado si habrá una sesión de lo que se llama preboda y luego una postboda. Igualmente necesitará saber hasta que hora se va a requerir su presencia y los tipos de encuadres y fotografías que va a querer de los invitados al enlace.
Como puedes imaginar todo esto lleva su tiempo y hay que ser conocedores también de los trabajos anterior que haya realizado el fotógrafo en cuestión para así valorar debidamente lo bien que toma las fotos y si las parejas que lo contratan quedan satisfechas, algo que ver ahora en muchos casos en Internet.
Realizar la valoración de los trabajos de vuestro futuro fotógrafo de bodas, necesita que pidáis muestras de bodas reales, nada de catálogos con modelos que luego no tienen nada que ver con un resultado con personal “normales.
Hay que conectar con el fotógrafo, pues él será quien refleje vuestros sentimientos en las fotos
Un dato esclarecedor es el siguiente: todo buen profesional va a pedir una entrevista con cada uno de los novios para conocer qué tipo de perfil es el que más conviene al reportaje en cuestión, desde si va a ser necesario uno más clásico o uno más desenfadado, etc. Por último, deben saberse antes de empezar la calidad de los álbumes finales, la resolución que tendrán las fotos y el trabajo a nivel de retoque que tendrán, puesto que, como es lógico, las fotos de la boda deben ser inmejorables para que se recuerden toda la vida.
Nosotros por ejemplo, nos lo pensamos bastante y como con 6 meses de antelación ya habíamos conocido al fotógrafo con el que hubo química desde el primer momento. Lo encontramos buscando en la red, vimos que había buenas opiniones sobre él y concertamos una cita para conocerle y que él nos conociera a nosotros. Todo un acierto haber contratado msanzphotographer.com La clave como he dicho es no dejar nada para la improvisación y que tanto el fotógrafo como vosotros conectéis.
¡Mucha suerte con la elección!