A todos nos gusta lucir siempre a la última, sin embargo, la moda va mucho más allá de comprarnos una u otra prenda de ropa. Alrededor de ella se generan cientos de miles de puestos de trabajo en todo el mundo que, cada poco tiempo, tienen que sacar nuevos productos al mercado para poder seguir viviendo. La moda es una actividad laboral y se monta un gran circo en torno a ella para poder darle la repercusión y la relevancia necesaria que hace falta para que se siga manteniendo. Una actividad que no es solo propia de la moda, sino que la podemos ver en otros muchos contextos, como, por ejemplo, las competiciones que se realizan a mayores de la liga de fútbol profesional. Esto se debe a que todo empresario y todo colectivo busca que sus creaciones o su negocio aparezca cada día de actualidad en los medios y es que solo de esta forma se podrá quedar en el recuerdo, en el inconsciente de la gente, de tal forma que cuando vayan a comprar, opten por alguno de nuestros productos.
Las modas que surgen hoy en día no están enfocadas a un público general y la mejor prueba de ello es que la mitad de los estilos que se publican, casi nadie los puede comprar ya que su coste es demasiado prohibitivo. Es por ello por lo que más allá de las diferentes pasarelas de moda que existen en todo el mundo, hay un mercado de ropa y complementos que se adapta a las realidades de los mercados, así como a las exigencias de sus compradores. En Queens Online nos encontraremos con la última moda en ropa y complementos al precio más competitivo y es que en una sociedad cada vez más consumista, ninguno buscamos ya que una prenda de ropa nos dure muchos años, sino que buscamos tener las últimas tendencias del mercado al mejor precio, para así, poder ir con la moda y no desentonar.
Las modas, a menudo, van por barrios, al menos esto era así hasta la aparición de las redes sociales. Hasta entonces, el contexto social en el que se movía cada uno de nosotros era el que marcaba cual debía de ser nuestro estilismo y ante que patrones nos debíamos de regir, sin embargo, hoy en día este contexto social, aunque sigue vigente, también está cambiando su tendencia hacia un patrón más globalizado en el que internet y las publicaciones de diferentes medios también tienen su opinión.
Sin embargo, a pesar de todo, los contextos siguen su curso y, en función de cual sea el nuestro, aunque vayamos a la moda, esa moda se acabará rigiendo por lo patrones habituales de nuestra clase. Esto es, cuando vamos a una boda, a pesar de toda moda que exista en el momento, siempre acabaremos ciñéndonos a una etiqueta y a una serie de normas no escritas, con el fin de no dar demasiado la nota. Lo mismo sucede si vamos a una cena de gala, al igual que a ninguno de nosotros se nos ocurriría ir jugar al fútbol de traje y corbata, en esos casos, simplemente nos ceñiríamos a la moda en lo que respecta a mangas, colores o largo de pantalones, pero nunca nos saldríamos del contexto social.
Las influencers, una nueva forma de publicidad para las marcas de ropa
En los últimos años, debido a la proliferación de las redes sociales, sobre todo, entre la juventud, muchas personas famosas y otras tantas anónimas que han sabido aprovechar el filón que les han aportado aplicaciones como Instagram, Twitter o Facebook, se han convertido, seguidor a seguidor, en todo un reclamo para la gran mayoría de las firmas de ropa. Esto se debe a que, mediante la publicación de posts con los modelos de las firmas, estas y estos influencers son capaces de generar, sin ayuda ninguna de los medios de comunicación tradicionales, las tendencias futuras, al mismo tiempo que atraen a cientos de miles de seguidores a través de sus perfiles en las redes sociales. En nuestro país, Laura Escanes, la mujer de Risto Mejide, ya supera a Paula Echevarría como influencer y es que sus estilismos generan un número de ventas mayor que los de su competidora y ambas solo son superadas por Aída Domenech, otra influencer a la que conocemos más popularmente por el nombre de Dulceida.