Llega el verano y a todos nos encanta de contar con un espacio acuático en el que refrescarnos, lucir palmito y desconectar por un instante de problemas y rutinas. Si estás pensando en duchas hidromasájes, jacuzzies, o en construir una piscina, eres de los nuestros. Un verdadero amante del agua.
Pero qué nos pasa a todos con el agua. Desde luego el elemento estrella desde hace años. Como el estampado de leopardo que ha reunido en un mismo momento a chonis e it-girls por igual, la obsesión de estar en remojo no tiene parangón. Los pisos ya no molan tanto si en el centro de la comunidad no hay una piscina, y puedes contemplar al feo de tu vecino y al gordo del presidente darse un chapuzón mientras estudias para la dichosa oposición. ¡Qué mejor break para retomar fuerzas! O si no puede ser, porque no vivimos en un piso de nueva construcción, ya nos vale!pues entonces una ducha con un panel de mandos que ya quisiera la Enterprise, con un sinfín de botones, chorros, temperaturas, ¡para cuándo, unos brazos que te enjabonen el pelo!. Y no nos olvidemos los jacuzzie, las bañeras spa… la moda ha llegado incluso a los partos, y ahora es posible tener a nuestro bebé en una bañera pensada no sólo para aliviar en la medida de lo posible el dolor, sino porque parece que de esta manera que el tránsito desde el acuoso útero hasta el seco mundo será más fácil y natural. ¡Luego de ahí a la ducha de hidromasaje!
El agua es un elemento de belleza, calma y relajación supremo,y al mismo tiempo un símbolo de poder y riqueza y, no, no nos referimos a temas de desertización global y futuras guerras por el oro líquido, nos referimos a que aquel que tiene una piscina, o un piso en la playa tiene más amigos que el resto, ¡no digamos ya si lo que posee es un barco!
Bromas a parte cuando llega el verano y la calor aprieta, nos siente tan bien el bañador como para subirnos a Instagram, siempre podemos optar por una poética foto de nuestros pies, muchos son los que piensan, analizan y estudian las posibilidades de conseguir una piscina. Muchas comunidades con patio a compartir entre todos los vecinos, locales de moda en azoteas y particulares que disponen de jardín, se rinden cada año al atractivo de disponer de un espacio privado donde disfrutar del sol y los chapuzones. Para ello, existe una amplia gama de posibilidades dependiendo del espacio, el presupuesto y el lugar donde se va a colocar, piscinas prefabricadas, de poliester o piscinas de fibra son algunos de los tipos que empresas como Piscinas DTP, especialistas en la instalación y construcción de las mismas proponen en su amplio catálogo de materiales y formas.
Si no estás en ningún caso de los anteriores, y al final te has rendido a la moda de agua, no desesperes, la posibilidad de un hidromasaje en casa, si no pone moreno, si que te permitirá disfrutar de unas duchas envidiables, hacerte con una piel resplandeciente, y si bien es cierto que no hará ligar tanto como con el barco,seguro que puntos suma.