La osteopatía está a medio camino entre la ciencia y la que no lo es, siendo una terapia que se demanda más cada día para el tratamiento de toda clase de dolores y enfermedades en relación con nuestros huesos, músculos o el sistema nervioso.
La OMS define la osteopatía como una medicina de carácter alternativo que lo que hace es tratar los problemas a nivel mecánico del cuerpo. En algunos países como Francia, Inglaterra o USA, se estudia en la Universidad, pero en España no está regulada como actividad profesional legalmente.
La osteopatía es de esas especialidades que más se piden por los que quieran resolver sus problemas musculares o de huesos con técnicas de tipo manual que no sean invasivas. De esta forma se puede recuperar la movilidad, mejorar las posturas y que se puedan activar los mecanismos de autocura por parte del cuerpo.
El caso es que el principal objetivo que tiene la osteopatía es ser una garantía de un funcionamiento mejor por parte de todo el cuerpo. La especialidad lo que hace es buscar el motivo y el origen de las propias lesiones para tener influencia en las propias capacidades de autorregulación por parte del organismo.
La medicina osteopática puede llegar a tratar las disfunciones a nivel de movilidad que terminan por afectar a cómo nos encontramos con respecto a nuestro estado de salud, según nos explica osteopata-quiropracticoalicante.es, lo que es muy valorado por parte de los pacientes.
Algo de historia
Si queremos saber de una vez por todas lo que es verdaderamente la osteopatía, hay que mirar atrás y buscar en sus orígenes, más concretamente a Estados Unidos en el siglo XIX, que es cuando el médico de nombre Andrew Taylor Still optó por establecer que la totalidad de sistemas que componen la estructura de nuestro cuerpo están todos conectados, por lo que cualquier enfermedad o dolor, al final termina reflejándose en los demás.
Una vez dejado clara la premisa que tenía, lo que hizo fue que mediante las manos, lo que hacía el terapeuta es poder tener la percepción de si ocurrían tensiones que afectaran al conjunto en cuestión.
Como es lógico, con el paso de los años la osteopatía ha ido sufriendo una evolución constante, centrándose ahora en el tratamiento de la columna, aunque podemos decir que se le atribuyen una serie de beneficios en las alteraciones a nivel digestivo y para el aparato urinario, así como en las enfermedades de carácter respiratorio.
Lo mismo podemos decir de las alteraciones a nivel de sueño, dolores de cabeza, ansiedad o vértigos. El caso es que los estudios dejan claro que es una terapia de lo más solvente y eficaz a la hora de tratar los dolores de espalda, en el especial las lumbalgias.
¿En qué momento debemos ir al osteópata? ¿ O vamos al fisioterapeuta o al traumatólogo?
Pese a que la osteopatía es una opción interesante en ciertos casos, siempre que sea impartida por especialistas con la preceptiva formación y experiencia, hay que asegurarse de que estamos ante una buena terapia para nuestro diagnóstico.
Pensemos que el traumatólogo por ejemplo es un médico que está especializado en el tratamiento de los traumas de carácter musculo-esquelético donde están los huesos, músculos y demás, por lo que se hace necesario acudir a él para que pueda descartar las fracturas, problema de cadera, ortopedia, prótesis y demás. La finalidad que tiene el traumatólogo es la del tratamiento quirúrgico y ortopédico de las lesiones y demás anomalías de los tendones, articulaciones o huesos.
Por otra parte el fisioterapeuta ayuda con las lesiones o demás patologías que precisen una rehabilitación, todo ello con el objetivo de la recuperación de la movilidad o el alivio del dolor en la zona que necesitemos, todo ello aplicando una serie de terapias como los masajes de carácter terapéuticos, terapias del dolor, ultrasonidos, laserterapia, etc.
Hay que tener claro también que la fisioterapia es muy buena cuando se quieren reducir las inflamaciones y los dolores musculares cónicos, o para ser de gran ayuda de cara a la recuperación de la movilidad después de que se haya hecho una intervención a nivel quirúrgico. Esperamos que todo te haya quedado meridianamente claro.
Estamos ante una técnica, la osteopatía, que ya va siendo conocida, pero que en un futuro próximo lo va a ser más por las innumerables ventajas que tienen para los pacientes en muchas de las dolencias que hemos mencionado. Así que ya sabes, si tienes la oportunidad, no dudes o tengas miedo en probarla, pues funciona.