Como dice el título, Avon es una marca americana que no ha sido una moda efímera, una larga historia la contempla y todo parece que va a seguir por mucho tiempo.
La empresa Avon en su momento comenzó llamándose California Perfume Company (CPC). Avon fue el resultado de una buena visión y de la tenacidad por conseguir un objetivo. Pese a que por el momento pueda parecer que es algo fortuito, Avon es un modelo de negocio que ha demostrado tener éxito y que ha sabido hacer un análisis de muchos elementos que han llevado a su éxito a lo largo de hace muchos años.
David McConell, su fundador fue un hombre hecho así mismo, el cual empezó a trabajar como vendedor de libros a puerta fría. Al final se le dio tan bien el negocio que se lo compró a su jefe.
Pasar de vender libros a fabricar perfumes
Algo que le llamó la atención a McConnel es que las muestras gratuitas de perfume que se daban como regalo a las señoras al comprar libros le llamaba más atención e interés a las mujeres que los propios libros.
Debido a esto, McConell fundó la CPC, la California Perfume Company
El modelo de negocio que hizo famosa a la empresa
Su gran mérito fue hacer caso a las señales que le decían que debía pasarse a la venta de perfumes en ligar de libros. Además ver el potencial que tenían las mujeres para relacionarse entre ellas e ir vendiendo productos mediante la recomendación el el clásico boca a boca.
CPC pasó a llamarse Avon
En 1928 empezó a llamarse Avon, siendo una referencia del río que pasa por Startford-on-Avon, donde nació Shakespeare. Desde que comenzó a operar hasta ahora la empresa ha utilizado una estrategia de comunicación que es un ejemplo para la venta directa y que han ido perfeccionando de manera significativa.
El primer catálogo que hicieron fue creado en 1896, donde se procedía a explicar que diferencias había entre los perfumes que se realizan mediante químicos y los florales, ya que estos últimos eran sensiblemente mejores.
De la misma forma, también se trataba el tema de la ventana que la empresa hacía que los productos fueran más económicos que los de la competencia.
En los primeros años la empresa tenía incluso un boletín al que llamaban Family Album, que se usaba como manera de comunicarse internamente con las representante, algo que luego dio después a una revista que se actualiza con idéntico fin.
La campaña que crearon en 1954 se llamó “Avon llamando a la puerta” Ding Dong, Avon Calling. Esta ha sido una de las más largas y exitosas en la historia con anuncios en los medios.
En la segunda guerra mundial, lo que hizo Avon fue convertir parte de las instalaciones que tenían en una fábrica de kits para los paracaidistas, productos de farmacia o máscaras de gas.
Esta sensibilidad a las necesidades del momento, lo podemos ver actualmente a nivel social en cuanto a los muchos temas que son de gran importancia para las mujeres a la hora de luchar contra el cáncer de mama, la violencia de género, así como otras diferentes con las que se puede decir que Avon ha sido fiel a todos los principios fundacionales y por lo que pasó a ser bastante conocida.
De igual forma, ha tenido una actividad solidaria con catástrofes como el ataque terrorista en las torres gemelas, además de en los muchos desastres a nivel natural que se produjeron en los últimos años.
En este año, como nos comentan desde Productos Avon Online, el número de países donde están presentes es más de un centenar y con más de 60 millones de distribuidoras. Básicamente es el testimonio de hacia dónde puede llegar una empresa que realmente tenga las cosas claras y sepa evolucionar con el paso del tiempo.
No es el ámbito donde se mueve Avon uno de los denominados fácil, pero lo cierto es que ellos han demostrado que nunca han bajado el pistón y ya podemos imaginar, que han pasado por toda clase de crisis económicas de todo tipo como las sociedades del siglo XX y XXI, pero han podido con todo.
Las nuevas tecnologías y la llegada de Internet también hizo que fuera necesario un esfuerzo extra para adaptarse a las nuevas necesidades y ha sido todo un éxito. Así que ya sabéis, si tenéis mentalidad emprendedora, sin duda Avon es uno de los mejores ejemplo de cómo se debe actuar, aunque no es nada fácil de llevar a cabo con tan buen tino.